Hoy os mostramos 10 consejos para limpiar y desinfectar tu casa a fondoy detenidamente, con la ayuda en su mayor parte de ingredientes y productos naturales, como el Vinagre Los 4 ladrones, los aceites esenciales o el limón. Empecemos por el principio, poner orden.
1. Despeja las habitaciones de trastos y de objetos innecesarios, antes de empezar a limpiar
Encuentra un nuevo lugar para todos aquellos objetos que creen un ambiente desordenado (revistas, papeles, juguetes, etc.). Poner un poco de orden a las habitaciones simplificará el proceso de limpieza y aumentará tu motivación, ya que el orden genera una sensación instantánea de bienestar y sosiego a tu alrededor.
2. Limpia de arriba a abajo y no de abajo a arriba
Ataca primero las zonas altas, luego las bajas. Y te recomendamos que lo hagas en este orden: primero, las molduras; luego, las lámparas de techo (junto con las bombillas); a continuación, las paredes y los zócalos.
Para llegar a todos los rincones, te será de gran ayuda una fregona limpia de microfibra o un plumero con mango telescópico. Atención: ambos instrumentos son también muy útiles para llegar a otros rincones difíciles de la casa (p. ej. detrás del sofá, encima de los armarios, etc.). Para atacar las áreas que quedan por encima de los ojos, tan sólo necesitarás mojar la fregona (debe estar siempre limpia) con un chorrito de agua.
Las superficies más próximas al suelo, tienden a acumular más polvo y suciedad. Para ellas, usa agua caliente y una gota de jabón para platos. Para los lavabos, añádele además un chorrito de vinagre Los 4 Ladrones: esto actuará como desinfectante para el moho y la humedad. Para aquellas zonas donde usar la fregona es incómodo o complicado, usa un simple paño de microfibra. Eso sí, es fundamental que el paño esté siempre limpio: enjuágalo con frecuencia y escúrrelo bien.
3. Limpia a fondo los cristales
Primero, usa el aspirador para quitar el polvo que permanece incrustado en el marco y las repisas de las ventanas. A continuación, rocía los cristales con un spray limpiador, de arriba a abajo. Deje que el detergente para cristales haga su trabajo durante unos pocos minutos. A continuación, y con la ayuda de un paño seco, retira el líquido limpiador. Si limpias los cristales por la parte de afuera en una dirección y en otra por la parte de adentro, te será más fácil ver y corregir los trazos aún sucios.
4. Retira el polvo de las persianas y de las cortinas
Para limpiar las persianas, basta con que uses la aspiradora con el cepillo incorporado. Y, en lugar de lavar las cortinas, espónjalas en la secadora durante unos minutos. Mientras lo haces, puedes limpiar la barra de la cortina y los anillos, pasándole un trapo humedecido con agua.
5. Saca bien el polvo de las demás superficies
Limpia las superficies restantes (muebles, estanterías de obra, librerías, etc.) con un limpiador de muebles y un paño suave. Para una limpieza extra rápida, ponte un calcetín limpio de algodón en la mano y retira el polvo con él, mientras utilizas la otra mano para levantar los obstáculos a su paso. Pasa finalmente un rodillo de pelusa por las pantallas de todas las lámparas.
6. El suelo: primero la aspiradora, después la fregona
En primer lugar, pasa la aspiradora por la superficie a limpiar. Te aconsejamos que, mientras absorbes el polvo, aromatices a la vez el área en cuestión, utilizando un aroma de los perfumes para aspirador de Boles d’olor. Para hacerlo debidamente, te recomendamos que muevas los muebles de la habitación, si es preciso. A continuación, friega el suelo con agua caliente y un chorro de vinagre Los 4 ladrones. Puedes añadirle unas gotas de aceite esencial de tu gusto para aromatizar el conjunto.
Este método sirve también para fregar los suelos de madera, los entarimados y los parqués. El vinagre y el agua en combinación actúan como un desinfectante natural y un limpiador de primera categoría.
7. Aplícate especialmente en el baño y la cocina
Limpiar y desinfectar tu casa a fondo significa, como bien sabes, poner especial atención a dos estancias por encima de las demás: el baño y la cocina. Como hemos dicho en algún post anterior, el agua y el vinagre actúan como un fantástico limpiador para lozas, azulejos y encimeras. Aplica –pues- esta fórmula para limpiar la cocina y el baño de tu hogar.
Desinfectante natural para baño y cocina
Ingredientes: Agua, vinagre los 4 ladrones y aceite esencial de limón.
- Llena una botella de spray con 1 taza de agua y 1/4 de taza de vinagre Los 4 ladrones.
- Para añadir una fragancia natural, aromatiza el vinagre antes de diluirlo en el agua con la piel de algún cítrico: limón, naranja, etc.
- Introduce en la mezcla unas gotas de aceite esencial de limón.
8. No dejes de limpiar los sofás
Como es lógico, si quieres limpiar y desinfectar tu casa en profundidad, no puedes olvidarte del sofá de tu casa. Allí, tú y los tuyos pasáis incontables horas, comiendo, viendo el televisor, descansando… Con tanto desgaste, no es de estrañar que acabe con manchas y rayaduras por todos lados. Ahora te contamos cómo ponerle remedio.
Cómo limpiar los sofás de tela sintética
Para limpiar los sofás de tela, pasa primero el aspirador por encima del tejido. A continuación, aplica el pulverizador Freshness de Boles d’olor para eliminar los malos olores y limpiar de suciedad.
Pasos a seguir:
- Pulveriza el sofá con Freshness, de Boles d’olor. Debes rociarlo a unos 40 cm del tejido.
- Deja actuar durante unos minutos
- Seca inmediatamente después, con un paño seco y limpio.
- Si temes manchar el tejido con el pulverizador Freshness, realiza una prueba en una parte no visible del sofá, antes de aplicarlo en toda la superficie.
Si tu sofá es de piel o de cuero, debes utilizar otro método diferente. Te lo describimos a continuación.
Cómo limpiar los sofás de piel
Lo primero que tienes que hacer es aspirar el polvo
Con un paño humedecido y una mezcla de agua destilada y jabón neutro, frota delicadamente y con movimientos circulares la superficie
A continuación, retira la suciedad que se haya desprendido del sofá de piel con una toalla ligeramente humedecida. Asegúrate de que la toalla esté bien enjuagada. Seguidamente, seca el sofá finalmente con un paño seco y limpio. Para hidratarlo –atención- puedes usar la misma crema hidratante que utilizas para nutrir la piel de tu rostro. Sí, has leído bien. No temas, si tu crema habitual funciona con tu piel, le puede ir bien también al sofá.
9. Desinfecta todas las superficies de contacto habitual
Es importante que dediques un tiempo a desinfectar todas aquellas superficies que entran habitualmente en contacto con las manos: pomos de las puertas, interruptores, ceniceros, bandejas de llaves, juguetes… Para hacerlo puedes utilizar un paño humedecido con el desinfectante natural que hemos descrito en el apartado 7.
10. Mantén limpios tus utensilios de limpieza
Cada cierto tiempo, ves enjuagando el paño con el que limpias o sustitúyelo por otro cuando esté muy sucio. De igual manera, vacía con frecuencia el cubo de la fregona o la bolsa de la aspiradora. De nada sirve que te esfuerces en limpiar y desinfectar tu casa a fondo si no mantienes tus herramientas de trabajo en perfecto estado y bien aseadas.
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